Creo que estás en un error porque estás relacionando tus emociones y cuestiones de afectos con cuestiones prácticas: ejemplo, si es verdad que el matrimonio solo se pospuso por la pérdida del empleo... ¿es eso suficiente para terminar con tu novio?
Es cierto que la opinión de los padres cuenta... Pero ¿es tan fuerte que no te permita tener paciencia para elaborar la situación?
A menos que haya otros problemas en la relación que tu no estés contando, creo que al tomar tus decisiones no has podido considerar además de las cuestiones prácticas tus sentimientos.
Mira, yo creo que primero que nada tienes que profundizar esta linea que empiezas a detectar, que es como te sientes. Me parece que necesitas hacerlo porque quizás es un área de tu vida que te cuesta manejar.
Hace tres semanas que terminaste con tu novio, no es tanto tiempo.
Te propongo que finalices esta pregunta con su calificación y luego te tomes unos días de reflexión sobre qué sientes y qué quieres hacer en la vida. Con el resultado de esa reflexiión puedes escribirme a mi blog
Hola, Helena, ante todo... no hace falta para un profesional de la
psicología haber vivido en forma personal la misma situación sino poder
reconocer las emociones encontradas que se viven en las distintas
situaciones según como la persona lo relata. La forma en que la
persona dice lo que le pasa es básico pues un mismo hecho afecta
diferente a distintas personas.
Realmente usted ha dado pruebas
De una gran paciencia y debe haber invertido mucho no solo en la
relación con su pareja sino en la buena voluntad para mejorar la
convivencia con las hijas de él. Sin embargo, este hecho más el hecho
de tener también una hija que no convive con ustedes genera una
situación desigual que me imagino que le acarreará no pocas
frustraciones cotidianas.
Si usted siente que la convivencia está
Enrarecida ese motivo solo ya es suficiente para que usted no siga
viviendo de esa manera. Me parece que hay un grave error de parte de
su pareja de no apoyarla frente a sus hijas, esto hace recaer todo el
peso del malestar sobre usted. Le aconsejo que descargue este malestar
también sobre su pareja, ya que el es en buena parte responsable de
esta situación y que se haga cargo de solucionar estos problemas de
convivencia sosteniendo la posición suya apoyándola frente a sus
hijas. Si su esposo les da un lugar desmedido en su vida, en el
sentido de permitirles opinar, inmiscuirse o tener decisiciòn sobre la
forma que el lleva adelante el hogar (que es responsabilidad de la
pareja... no de los hijos que allí habiten) entonces él deberá revisar
su rol de padre. Temo decirle que seguramente el hecho de que usted no
viva con su hija también no sólo debe tener para usted una historia que
le pesa (y que no desarrolla aquí pero que imagino que es muy
importante) debe estar influyendo en usted y confundiendo también sus
emociones. Esto requiere una evaluación mayor que no podemos hacer en
este lugar.
Usted cae en un error cuando dice que sus hijas son
lo primero: él debe ocuparse de que estén bien y de darles todo lo
necesario emocional y materialmente pero ellas no deben reglar la vida
de él como hombre adulto y mucho menos la suya, sino caemos en la
posición de los hijos como los reyes, posición muy negativa para el
desarrollo de ellas como personas.
Le aconsejo con total insistencia que usted y su esposo busquen cuanto antes un psicoterapeuta de parejas.
Primero,
le propongo que finalice esta pregunta con su calificación. Tómese el
tiempo luego de conversar con su esposo a solas sobre este tema, si
pueden en algún neutral, un restaurante, un espacio de tranquilidad de
los dos) y luego si lo desea escríbame a través de mi blog y cuénteme
de los resultados.
(
http://www.psicologiaymigracion.blogspot.com/2008/05/orientacin-psicolgica-on-line.html).
Quedo a tu disposición para ampliar sobre este tema luego de que hays tenido tiempo de pensar en lo que te propongo.