Anónimo
Problemas con mi ex y mi hija
Hola, quería hacerte una consulta para ver que me recomiendas. Trata sobre mi hija y mi ex mujer. Yo ya venia sospechando algo por la conducta que tenia mi hija cunado estaba conmigo y mi familia. El otro día mi hija estando a solas con una persona de su confianza se hecho a llorar y empezó a contarle que su madre le estaba hablando mal de mi, mi pareja y mi familia. Decía que tenia que odiar a mi pareja que yo no la quería por que no vivía con ella, que su actual pareja es su padrastro y que tenia que quererle a el, que mi familia era mala que no la quiere... Un montón de cosas despectiva de mi y de mi familia. Por otro lado también confeso que su madre la acusaba a ella de los problemas que tiene con su actual pareja, que es la culpable que tuviera un hijo con su pareja. También que cuando se emfadaban ella y su pareja la pegaba culpándola y que en varia ocasiones han tenido que salir de casa y dormir fuera por tales discursione. También ha presenciado excenas violenta en el ámbito de la familia de ella. La niña decía que no sabia que hacer por que ella esta bien conmigo y mi familia pero su madre no quiere. Una vez hablando con su madtre la niña puso el manos libres sin querer y se la escucho ella tratando de gentuza a mis padres, que eran quien estanban con ella en ese momento. Todo y muchas cosas más que seria muy largo de contar por aquí.
Todo esto se lo contó como un secreto a mi actual pareja, que a pesar de lo que le dice su madre, se llevan excepcionalmente y son muy amigas. Por mi parte y la de i familia tenemos con ella un trato excepcional. A mi aun me respeta pero la actitud con el resto de mi familia ha sufrido un gran deteriodo. Ella no sabe que yo se todo esto y tengo miedo de que si se lo comento a mi ex, ella tome represarías con ella. Actualmente tenemos la patria y potestad compartida y la ella tiene la custodia.
¿Qué puedo hacer?
Muchas gracias
Todo esto se lo contó como un secreto a mi actual pareja, que a pesar de lo que le dice su madre, se llevan excepcionalmente y son muy amigas. Por mi parte y la de i familia tenemos con ella un trato excepcional. A mi aun me respeta pero la actitud con el resto de mi familia ha sufrido un gran deteriodo. Ella no sabe que yo se todo esto y tengo miedo de que si se lo comento a mi ex, ella tome represarías con ella. Actualmente tenemos la patria y potestad compartida y la ella tiene la custodia.
¿Qué puedo hacer?
Muchas gracias
1 Respuesta
Respuesta de silviawav
1
Qué situación tan difícil, sobre todo para la niña. Puedes hacer tres cosas.
1. Habla con tu familia. Aunque ya lo sepan, ten esta conversación para hacerlos parte de tu estrategia. Expón la situación, pero no te centres en hablar de tu ex. Agradece el trato excepcional que dan a tu hija, y pide que sean especialmente tolerantes y afectuosos con ella. Cuando estén juntos (tú, la niña, tu familia) vean fotografías y otros recuerdos del tiempo en el que no había este problema.
2. Habla con la niña. Aunque ya se lo hayas dicho, y tenga la edad que tenga. No busques el momento apropiado: simplemente siéntate solo con ella y dile explícitamente que te separaste de su mamá porque [ya no podían convivir, ya no querían estar juntos, estaban mejor separados] y que eso no tiene nada que ver con ella. Que a ella (a tu hija) la quieres igual que cuando vivían juntos y que la vas a querer siempre. Si tiene edad para preguntar por qué le dices eso en ese momento, dile que a veces te da miedo que lo olvide o no lo sepa, y que quieres asegurarte de que siempre lo tenga presente.
3. Habla con tu ex. Busca que sea en un lugar público, discreto, cómodo, ustedes solos. Ármate de ecuanimidad antes de verla. Ten muy en cuenta que ella es una persona que la está pasando mal (no se lo digas, tenlo en cuenta); probablemente estará a la defensiva, o incluso puede actuar ofensivamente. Tú actúa con consideración y respeto, pero yendo al punto.
a) Empieza por mencionar que tienen en común su preocupación por la niña (no insinúes que a ella no le preocupa, no la critiques); a partir de este punto, háblale de lo bueno que será para la niña crecer contando con todos sus familiares y muestra tu preocupación por el deterioro de la relación de la niña con tu familia: no muestres preocupación sobre las causas de este deterioro, sino por el deterioro en sí mismo. Pídele que te permita pasar más tiempo con la niña, para que ella pase más tiempo con tu familia. Si acepta, procede a ofrecerle a tu ex, apoyo para cualquier situación. Se trata de estrategia: tu hija necesita que ella esté bien. Si no acepta, mientras su actitud no sea francamente negativa, agradece sinceramente por su tiempo y vuelve a intentarlo después.
b) Dile que te gustaría que se pusieran de acuerdo sobre cómo van a portarse con la niña, para que en tu casa tenga las mismas reglas que en su casa. Dilo así, para darle la prerrogativa de ser quien indica cómo serán las cosas. Menciona por ejemplo, la cantidad de dinero que se le puede dar, los programas de televisión que puede ver o las palabras que se le permite o no usar. Es necesario que la dejes ser quien marca la pauta, porque al llegar al punto de cómo sancionar una mala conducta, estarás en posición para que "gane" tu postura sobre, por ejemplo, pegar o no pegar y en qué condiciones. Además, habrán de ponerse de acuerdo sobre si sus parejas pueden o no corregir y sancionar a su hija; tratar ese tema permite que le des un lugar a la pareja de ella, y con eso, implícitamente (¡No lo menciones!), te ocupas de que ellos no pretendan que por la presencia de un padrastro se elimine tu figura, de padre.
Por último, considera las siguientes señales: si en las visitas tu hija pasa de estar huraña o rechazante, a ser agresiva hacia ti o tu familia, y sobre todo: si empieza a usar los argumentos de su madre como propios, el problema se ha agravado. En ese caso, habrá otros pasos a seguir.
1. Habla con tu familia. Aunque ya lo sepan, ten esta conversación para hacerlos parte de tu estrategia. Expón la situación, pero no te centres en hablar de tu ex. Agradece el trato excepcional que dan a tu hija, y pide que sean especialmente tolerantes y afectuosos con ella. Cuando estén juntos (tú, la niña, tu familia) vean fotografías y otros recuerdos del tiempo en el que no había este problema.
2. Habla con la niña. Aunque ya se lo hayas dicho, y tenga la edad que tenga. No busques el momento apropiado: simplemente siéntate solo con ella y dile explícitamente que te separaste de su mamá porque [ya no podían convivir, ya no querían estar juntos, estaban mejor separados] y que eso no tiene nada que ver con ella. Que a ella (a tu hija) la quieres igual que cuando vivían juntos y que la vas a querer siempre. Si tiene edad para preguntar por qué le dices eso en ese momento, dile que a veces te da miedo que lo olvide o no lo sepa, y que quieres asegurarte de que siempre lo tenga presente.
3. Habla con tu ex. Busca que sea en un lugar público, discreto, cómodo, ustedes solos. Ármate de ecuanimidad antes de verla. Ten muy en cuenta que ella es una persona que la está pasando mal (no se lo digas, tenlo en cuenta); probablemente estará a la defensiva, o incluso puede actuar ofensivamente. Tú actúa con consideración y respeto, pero yendo al punto.
a) Empieza por mencionar que tienen en común su preocupación por la niña (no insinúes que a ella no le preocupa, no la critiques); a partir de este punto, háblale de lo bueno que será para la niña crecer contando con todos sus familiares y muestra tu preocupación por el deterioro de la relación de la niña con tu familia: no muestres preocupación sobre las causas de este deterioro, sino por el deterioro en sí mismo. Pídele que te permita pasar más tiempo con la niña, para que ella pase más tiempo con tu familia. Si acepta, procede a ofrecerle a tu ex, apoyo para cualquier situación. Se trata de estrategia: tu hija necesita que ella esté bien. Si no acepta, mientras su actitud no sea francamente negativa, agradece sinceramente por su tiempo y vuelve a intentarlo después.
b) Dile que te gustaría que se pusieran de acuerdo sobre cómo van a portarse con la niña, para que en tu casa tenga las mismas reglas que en su casa. Dilo así, para darle la prerrogativa de ser quien indica cómo serán las cosas. Menciona por ejemplo, la cantidad de dinero que se le puede dar, los programas de televisión que puede ver o las palabras que se le permite o no usar. Es necesario que la dejes ser quien marca la pauta, porque al llegar al punto de cómo sancionar una mala conducta, estarás en posición para que "gane" tu postura sobre, por ejemplo, pegar o no pegar y en qué condiciones. Además, habrán de ponerse de acuerdo sobre si sus parejas pueden o no corregir y sancionar a su hija; tratar ese tema permite que le des un lugar a la pareja de ella, y con eso, implícitamente (¡No lo menciones!), te ocupas de que ellos no pretendan que por la presencia de un padrastro se elimine tu figura, de padre.
Por último, considera las siguientes señales: si en las visitas tu hija pasa de estar huraña o rechazante, a ser agresiva hacia ti o tu familia, y sobre todo: si empieza a usar los argumentos de su madre como propios, el problema se ha agravado. En ese caso, habrá otros pasos a seguir.